Una Tradicion Secreta

En esta ocasión traigo para ustedes un articulo que habla sobre la historia de las máscaras en la lucha libre, sobre todo en México. El autor de este articulo es Juan Sandoval, así que yo solo me encargo de publicarlo.

Así que no duden en leerlo, es muy interesante, sobre todo si les gusta la lucha libre y tenían curiosidad de saber como surgió esta curiosa tradición que es muy común y altamente respetada dentro de este deporte en México.

La Máscara: 74 años de Historia
Por: Juan Sandoval

Hablar de lucha libre a nivel mundial es sinónimo de interés o desprecio, desde un sencillo debate que cuestiona si este deporte es real o actuado. En términos generales la lucha libre es uno de los deportes que más ha crecido, en tan solo cien años proveniente de Europa fue capaz de llegar a la Unión Americana, Canadá, México, Puerto Rico, República Dominicana, Japón, etc.

Hoy día sigue expandiéndose a países que se han visto atraídos a este fenómeno gracias a los medios de comunicación, principalmente Internet y televisión.

Precisamente México es privilegiado con este deporte, pues fue de los primeros países en albergarla y darle un lugar como deporte y no solo ser exhibida en circos o teatros como se solía hacer en ese tiempo. De la mano del Sr. Salvador Lutteroth Gonzalez (qepd) quien en el año de 1933 instauró la primera empresa de lucha llamada EMLL (Empresa Mexicana de Lucha Libre, hoy CMLL Consejo Mundial de Lucha Libre), dándole importancia y en sus primeras presentaciones con gladiadores extranjeros. La parte sin duda es la instauración de esta deporte en nuestro país, pero no hubiese tenido el mismo efecto de popularidad sin un objeto: La Máscara.

París, Francia: corría el año de 1863, un encuentro de lucha grecorromana sería el principio de una nueva era, ya que uno de los gladiadores subió enmascarado, lo que causó curiosidad entre los allí presentes. Lamentablemente el nombre del luchador no quedó registrado, por consecuente este es un dato meramente anecdótico.

Pasamos rápidamente a Estados Unidos, concretamente a noviembre de 1933, justo cuando la lucha libre se había instaurado en México. Con cierta emoción apareció un luchador enmascarado llamado Jim Atts quien le daba vida a Masked Marvel, usaba una mascara color negra y una calavera pintada en la parte frontal, este gladiador se presentaba en el Madison Square Garden de New York. No obstante la mascara fue solo una moda pasajera, la gente de USA no veia con buenos ojos que un gladiador escondiera su rostro por considerarsele de poca confianza, eran satanizados por la sociedad y los pocos enmascarados que habían desaparecieron sin dejar rastro.

Ciudad de México, México: En abril de 1934 un Irlandés de nombre Ciclón McKey recurrió a un zapatero de nombre Antonio Martínez, quien confeccionaba botas para los luchadores, pues era lógico que un luchador usara botas de boxeo, el irlandés pidió "una capa que le cubriera el rostro y que le fuera difícil a los adversarios que se la quitaran", el Sr. Martínez tomo algunas medidas y realizó el trabajo en piel.

Días después el extranjero llego al taller de Don Antonio y lógico quería ver el resultado de su pedido. McKey quedó decepcionado pues no le quedaba bien esa capa con antifaz y se fue muy molesto y con el material y el dinero tirado a la basura. Don Antonio también estaba molesto, por lo que decidió olvidarlo todo.

Unas semanas después Don Antonio se encontraba en su taller y de repente se presentó el irlandés con una sonrisa, lo cual desconcertó al zapatero. McKey solicitó 6 capas similares a las que Don Antonio había realizado, por supuesto el no aceptó en un principio, pues no quedaban bien, pero ante la insistencia del extranjero por fin aceptó y tomó medidas, esta vez ya sabia en donde estaban los errores y con éxito realizó la mascara, hecha de piel. La razón por la que el Irlandés regresó fue porque a palabras de el, ningún artesano en el mundo fue capaz de realizar un trabajo similar.

Pasaron los años y en 1938 apareció el primer luchador mexicano en usar máscara: El Murciélago Velázquez, quien se presentó con una mascara color negra con aplicaciones sencillas color rojo alrededor de la nariz, ojos y boca, cabe mencionar que las primeras mascaras eran de piel, pues los artesanos que las fabricaban tenían el oficio del calzado y es irónico, pues un material que cubría los pies también lo hacia con la cabeza. Estas máscaras de piel causaban mucha molestia en la cara del gladiador, pues no permitían la transpiración adecuada, con las lavadas, la piel se ponía rígida y áspera, sin mencionar que el calor de la máscara causaba calvicie.

Antes de finalizar la década de los años 30, apareció un material diferente llamado Raso Satinado, que se usaba principalmente para tapizar muebles o elaborar cortinas, las mascaras fabricadas con Raso brindaron comodidad, pues permitían una transpiración adecuada, además que la piel pasó a formar parte de las aplicaciones, por lo que las máscaras se volvieron llamativas. El material dejó de usarse a finales de los 60.

En 1942 la máscara se convirtió en un fenómeno cuando apareció la máxima leyenda de la lucha mexicana: El Santo, presentándose con una máscara de piel color plata, la gente se admiró ante tan majestuosa incógnita, además del carisma que este gladiador irradiaba por toda la arena, posteriormente en 1948 aparece otro ícono mexicano de nombre Blue Demon, quien sería rival del Santo tanto en películas como arriba de un cuadrilátero.

Llegaron los años 60 y existían un sin fin de luchadores enmascarados, y por supuesto daban colorido a la lucha libre con la forma de aquellas incógnitas. En 1967 apareció el luchador mexicano más conocido en todo el mundo, me refiero a Mil Máscaras, un peso completo natural que antes formaba parte de la Selección Mexicana de Lucha Olímpica, pero por razones de falta de apoyo decidió incursionar al mundo de la lucha libre.

Como podrá usted observar querido lector, este un un texto informativo, pero no quisiera despedirme sin compartirles la importancia de este objeto en territorio mexicano.

Ustedes acaban de observar una breve historia sobre la mascara, esta llenó de magia la lucha libre, el publico mexicano siempre entregado se sintió atraído ante el misterio que esta guarda, hablar de una máscara no solo implica admiración por su belleza, sino la importancia que tiene para quien la porta.

En México es más importante una máscara que alguna cabellera, campeonato, torneo o lucha estelar. Si tomamos en cuenta el cariño que siente un luchador por su incógnita y la historia que hay detrás de ella comprenderemos que no solo es un adorno, sino un artículo de mucha tradición y por consecuencia de cultura en tierras Aztecas.

La historia y la tradición se podrían resumir en una magia, la cual yo no quisiera averiguar, sin duda por temor a corromper esa magia, el amor que no solamente siento yo, sino millones de personas en el mundo y concretamente en México sobre una máscara es algo que cualquier aficionado extranjero quisiera sentir, probar las mieles de una tradición que ya se ha convertido en parte de la cultura de todo un país.

Comentarios

Luis Meixueiro (El Produc!) ha dicho que…
Ya era justo y necesario publicar ese artículo!!!! Yeah!!!